Prenatal y post

Por mi propia experiencia, he comprobado cómo la práctica regular de yoga durante el embarazo (en mi caso, hasta el día antes de dar a luz) aporta grandes beneficios tanto durante el embarazo, como en el parto y el puerperio.

YOGA PRENATAL:

Durante el embarazo, la mujer se siente más ligera, más fuerte, más relajada, más tranquila y más vinculada con su bebé; en el parto, la respiración y la postura corporal surgen instintivamente gracias a la práctica durante los meses previos; y en el postparto, la recuperación física es mucho más rápida y hay menos posibilidades de depresión, por el vínculo emocional que se ha trabajado antes de dar a luz.



Si estás interesada en recibir clases de yoga especiales para embarazadas o conoces a alguien a quien le puede interesar,  tienes cualquier consulta sobre estas clases, ponte en contacto conmigo aquí.



YOGA POSTNATAL:



Superada la cuarentena, los beneficios de practicar yoga también son numerosos, tanto en caso de parto como cesárea. Además de ayudar a la recuperación física y emocional, fortalecemos el vínculo con nuestro bebé, que también asiste a las clases.
Sobre todo cuando se trata de clases en grupo, las mamás podemos compartir nuestras emociones, nuestras inquietudes, el desarrollo de nuestros bebés y nos sentimos acompañadas por el resto del grupo, fomentando la idea de "tribu", tan alejada de la crianza de nuestros hijos en la sociedad actual, pero tan ansiada estos últimos años.

Si estás interesada en asistir a clases de yoga postnatal, con tu bebé, ponte en contacto conmigo aquí.

¡Hasta pronto!

Namaste!